Detenido en crisis poselectoral de Venezuela intenta suicidarse, denuncia su familia

"La decisión es no sufrir más", es el cierre de una carta de despedida escrita por uno de los detenidos por "terrorismo" tras las protestas contra la reelección del presidente Nicolás Maduro. El domingo intentó suicidarse, según informaron sus familiares.

Las autoridades, sin embargo, negaron lo sucedido y aseguraron que Carlos Valecillo, de 34 años, fue trasladado al servicio médico para ser atendido por abscesos en la cara.

Sus tres hermanas viajaron en moto, apenas supieron la noticia, desde Caracas hasta Tocorón, a unos 120 km de distancia, donde Valecillo está preso en un penal de máxima seguridad.

"Queremos una fe de vida", dijo a la AFP su hermana Yurisme Sánchez, de 40 años. "Lo que nos mostraron fue solo una foto, y eso no nos garantiza que esté bien".

"Queremos saber con certeza que está vivo (...), que nos permitan verlo", insistió.

Según Sánchez, un grupo de presos logró filtrar la información, que le llegó gracias a una mujer que la contactó tras escuchar lo sucedido mientras caminaba cerca del penal, conocido por haber sido centro de operaciones de la temida banda Tren de Aragua hasta su desalojo en 2023.

Valecillo fue arrestado el 29 de julio, pocas horas después de que Maduro fuera proclamado para un tercer mandato consecutivo de seis años en unas elecciones que la oposición asegura fueron ganadas por su candidato, el exiliado Edmundo González Urrutia.

Unas 2,400 personas, incluidos un centenar de adolescentes, fueron detenidas en los días siguientes a los comicios, en medio de una fuerte represión de las protestas en todo el país, que el gobierno califica de intento de desestabilización para promover una guerra civil.

"¡Mi hermano es inocente!", afirmó Mónica Sánchez, otra hermana de Valecillo, de 37 años. "Está pasando por una depresión muy grave".

Valecillo expresó su intención de acabar con su vida en una carta enviada a su madre. Aunque no tiene fecha, su contenido se hizo viral en las redes sociales el pasado viernes.

"Te escribo estas cortas líneas para pedirte que cuides mucho de mi hijo, te lo encargo", escribió. "Que me perdonen todos, pero ya no aguanto más esta situación (...). De nada sirve estar vivo si no puedo disfrutar de mi hijo y de mis seres queridos".

"Desde el cielo los cuidaré a todos", finaliza.

La semana pasada, una adolescente fue liberada después de que circulara una carta similar en la que también expresó su deseo de atentar contra su vida.

En una plaza cercana, una veintena de familiares de los presos se congregan a la espera de noticias. "Mi hijo no es terrorista", "mi esposo no es terrorista", se leía en las camisetas blancas que usaban, las cuales también mostraban fotos de sus seres queridos.

Estas personas han denunciado las condiciones de reclusión, desde la escasa o nula comida hasta las torturas. El gobierno ha negado estas acusaciones.