Milán da el último adiós al "rey" de la moda, Giorgio Armani

Varios cientos de personas acudieron, incluso horas antes de su apertura a las 9.00 hora local, a la capilla ardiente instalada este sábado en Milán para despedir al diseñador Giorgio Armani, llamado desde siempre el "rey", una institución de la moda italiana en el mundo y al que todos admiraron por su creatividad pero también por su instinto empresarial.

La capilla ardiente, que permanecerá abierta también el domingo, fue instalada en el Teatro Armani, en la calle Bergognone 59, en Milán, donde Armani encargó construir al arquitecto japonés Tadao Ando un enorme edificio que se inauguró en 2015 dedicado a la creatividad con oficinas, espacios expositivos a las pasarelas y otros eventos culturales.

En el lugar donde Armani presentaba sus colecciones durante las Semanas de la Moda de Milán, se colocó en la casi total oscuridad el féretro con un ramo de flores blancas y una alfombra de farolilllos en el suelo con una placa de alabastro con un crucifijo y la presencia de una guardia de honor de los Carabineros.

Tras el ataúd, una gran pantalla muestra el retrato sonriente de Armani y la que ha sido elegida como su frase-testamento: "El legado que espero dejar es el compromiso por el respeto y cuidado por las personas y la realidad. Ahí es donde todo comienza".

Junto al féretro el de Armani, Leo Dell'Orco, su compañero de vida también en los últimos 20 años, Federico Marchetti, fundador de Yoox, amigo fiel y miembro del consejo de administración de Giorgio Armani SpA y sus sobrinos, entre ellos Andrea Camerana, uno de sus máximos colaboradores. La familia siempre estuvo cerca del diseñador.