Zelenski es acusado de autoritarismo tras las redadas a la agencia anticorrupción

Después de que una operación del servicio secreto contra altos cargos de la Oficina Nacional Anticorrupción (NABU) que habrían colaborado con Rusia fuera denunciada por la sociedad civil como una maniobra de la administración de Volodímir Zelenski para reforzar su poder, el Parlamento del país dio este martes otro paso en lo que muchas oenegés denuncian como un proceso de erosión de los mecanismos de control al Ejecutivo al aprobar una ley que resta independencia a la misma NABU.

Aprobada gracias a la mayoría absoluta en la Cámara del partido de Zelenski, la ley da poder sobre la actividad de la NABU y de la Fiscalía Especial Anticorrupción (SAP) al fiscal general nombrado por la oficina del presidente, lo que es percibido desde las dos agencias afectadas como un golpe de gracia a su autonomía.

"En la práctica", dijo la NABU en un comunicado publicado antes de la votación, "si esta ley se aprueba la SAP se convertirá en una entidad simbólica, y la NABU perderá su independencia y pasará a ser una división de la Oficina del Fiscal General".

Redadas masivas en la víspera

El lunes, antes de que se aprobara la polémica ley, el servicio secreto ucraniano efectuó decenas de redadas contra empleados de la Oficina Nacional Anticorrupción (NABU) y detuvo a dos de sus detectives bajo acusaciones de colaborar con Rusia.

La explicación oficial a la operación no ha convencido a las voces más influyentes de la sociedad civil ni a los socios internacionales de Kiev.

Ellos, en un toque de atención muy poco habitual desde el comienzo de la guerra en 2022, han expresado su preocupación por las acciones del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU).